La remolacha Kestrel presenta una excelente estabilidad de producción durante todo el año

La temporada más calurosa del año está llegando, y junto con ella algunas preferencias de alimentos también. Es un hecho de que las altas temperaturas típicas del verano motivan a un mayor consumo de alimentos más livianos y más frescos, entre ellos las hortalizas que, además de nutritivas, también son opciones muy versátiles y sabrosas.

Y cuando el requisito es la calidad de las hortalizas, Sakata Seed Sudamerica, una empresa líder en hortalizas en Sudamérica, es la gran referencia. Con un portafolio completo de variedades ya consagradas, la compañía destaca un cultivar de alto rendimiento: la remolacha Kestrel.

Una planta rústica híbrida con alta tolerancia al cultivo en campo abierto y a las manchas foliares, Kestrel produce raíces redondeadas, muy uniformes y estables en diferentes condiciones del suelo, y su color externo e interno es púrpura. Además, el cultivar tiene un sabor incomparable que lo hace muy atractivo para su consumo en ensaladas, guisos y jugos.

 La variedad es todo un éxito en el Perú

Perú actualmente tiene más de mil hectáreas de remolacha híbrida sembrada en la zona costera y en las montañas. Por lo tanto, la remolacha Kestrel se está cultivando de norte a sur del país y con resultados muy positivos a la intemperie. El cultivar ha recibido una aceptación extraordinaria en el mercado local, incluso el índice de sustitución de la semilla de polinización abierta por la híbrida, ya que proporciona un mayor rendimiento en el cultivo y la calidad del producto cosechado.

«En la actualidad estamos trabajando en el Perú con la variedad Kestrel, un producto que permite la siembra durante todo el año y con menos demanda de uso de semillas por hectárea, debido a su excelente germinación», afirma Christopher Egovil, representante comercial de Sakata en Perú.

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